En 1388, Juan de Gant, primer Duque de Lancaster y señor hasta el año anterior de Santiago de Compostela, Vigo y Pontevedra, abandonó las aspiraciones de hacerse con el trono de Juan I de Castilla (estaba casado con la infanta Constanza de esa corte) y para demostrar su buena voluntad concedió la mano de su hija Katherine, de 16 años, al hijo menor del rey castellano, Enrique, Príncipe de Asturias, que por entonces era un niño de apenas 9.
Pero ese matrimonio nunca se pudo celebrar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario