Otras exploraciones respondían a proyectos personales: es el caso de Bambi. Bambi significó una gran innovación en el aspecto técnico: sus secuencias multiplano (que tanta profundidad conseguían en la gran pantalla y que tanto influyeron en la más reciente Tarzan) fueron comentadas por todos y aún hoy siguen recibiendo elogios y levantando admiración. Pero no sólo en el terreno visual: el campo sonoro de Bambi también estaba bien abonado, como denotan sus tres nominaciones a los Oscar: Mejor Sonido, Mejor Banda Sonora y Mejor Canción.
A este hermoso tema de amor, que no consiguió alzarse con la estatuílla (es duro competir contra "White christmas"), a su compositor (Frank Churchill) y su letrista (Larry Morey), y a su hermoso título ("Love is a song") dedicamos hoy esta entrada.
Es breve, sencilla y poéticamente inocente. El amor es una canción... que nunca acaba.
Love is a song that never ends.
Life may be swift and fleeting,
Hope may die yet love's beautiful music
Comes each day like the dawn.
Love is a song that never ends,
One simple theme repeating
Like the voice of a heavenly choir
Love's sweet music flows on.
Life may be swift and fleeting,
Hope may die yet love's beautiful music
Comes each day like the dawn.
Love is a song that never ends,
One simple theme repeating
Like the voice of a heavenly choir
Love's sweet music flows on.
No hay comentarios:
Publicar un comentario