Alison estaba contenta. Dazzler había cantado bien, la actuación había salido como la habían ensayado y, con el pequeño empujón secreto de sus poderes mutantes, los efectos especiales habían quedado insuperables. El público del Palacio había enloquecido, y su manager y el resto de su equipo la felicitaban sin parar. Demasiado. Necesitaba airearse un poco antes de volver al cubículo reservado a cada uno de los intérpretes para que las cámaras recogieran sus reacciones durante las votaciones. Aún quedaban unas cuantas actuaciones para llegar al intermedio y el espectáculo organizado por Latveria, así que decidió escabullirse y... Sí, buscaría al macizo británico, a ver si lo azoraba un poquito antes de que saliera a cantar. Estaba claro que no la había cogido del brazo con ánimo de ligoteo, o la había confundido con alguien... o intentaba confundirla, y en ese caso se inclinaba ante lo travieso de sus juegos mentales.
Preguntó por Brian en el backstage (ahora ya no se le olvidaba el nombre) y le dijeron que lo habían visto más atrás. Luego más abajo. El Palacio era enorme y el cableado eléctrico y audiovisual del Festival se expandía aparentemente sin fin. ¿Dónde se había metido aquel inglés? Se estaba alejando demasiado, se prometió que esta era la última esquina que doblaba, y si no lo encontraba... Alguien la aferró y le tapó la boca.
Era Brian, que le hizo un gesto de silencio antes de retirar la mano, señalar un grueso cable pegado al techo, tan grande como uno de sus brazos, y que descendía por un pozo hacia los sótanos del Palacio.
- El rey de Latveria es un tipo peligroso -susurró-. Sospechamos que puede querer hacer algo hoy, esta noche, durante el Festival.
- Sí, seguro que va a volarnos por los aires porque odia Eurovisión -Dazzler ahogó una risa-. Está entre el público, figura, en el palco de honor. Oye, ¿sospechamos? ¿Quiénes...?
- Ese cable es de nivel transoceánico -añadió Brian comenzando a moverse hacia el pozo- transmite una cantidad de datos excesiva. Equivalente a 1700 DVD por segundo.
- La retransmisión...
- O transmite desde ahí abajo o hacia abajo. En cualquiera de los dos casos, ¿te parece normal?
Brian llegó hasta la boca del pozo y comenzó a descender por las anillas metálicas que habían clavado en la pared a modo de peldaños. A Alison toda aquella paranoia de James Bond oxigenado no le convencía, pero le parecía muy mono que aún calculara el volumen de datos en DVDs. ¡Era tan de los 90!
El inglés llegó enseguida al fondo del pozo. Se oía un zumbido de fondo pero estaba bastante oscuro. Alison llegó enseguida y... de algún modo el zumbido se redujo y su entorno pareció iluminarse con motas de luz de colores que daban vueltas en espirales, alumbrando un único pasadizo que partía hacia adelante. Alison movió los dedos como dirigiendo una orquesta y los puntos de luz danzaron al compás.
- Convierto la luz en sonido. Y al revés.
- Ya decía yo que tus efectos especiales eran muy buenos.
- Seguro que tú también tienes tus truquillos.
- Sí. En Gran Bretaña. Aquí... Haremos lo que podamos. Disculpa que pase primero -¡qué mono!
El túnel les llevó en línea recta hacia... Alison se había perdido.
- ¿Dónde estamos?
- Más o menos... 70 pies debajo del escenario. Unos 20 metros.
- Soy de Nueva York, muñeco: en pies me sirve.
Aquello se abría de golpe en una estancia grande, profunda, cilíndrica, llena de multitud de cables y máquinas que arrojaban su propio fulgor, y donde el zumbido mecánico y eléctrico aumentaba sobremanera. A su diestra había una escalera de piedra que bajaba hasta el fondo, pero desde arriba ya se veía que en el centro de las máquinas había una mujer joven, vestida de fiesta, de pie sobre una plataforma, y que un hombre mayor con bigote se inclinaba sobre los controles de varios aparatos.
- Letzte phase -dijo el hombre-. Wir wenden uns dem muster auf Englisch zu.
- ¿Qué dice? -susurró Alison, que llevaba dos días peleándose con todos los carteles en alemán de Latveria. Pero cuando la mujer respondió, lo hizo en inglés.
- Todos los sistemas están operativos al 100%. Recibimos la señal portadora. Cerrando cubierta exterior.
La mujer se giró levemente y Brian y Alison vieron que, aunque parecía una joven atractiva, su cara estaba partida en dos mitades que ahora se cerraban sobre un complejo interior mecánico, hasta crear, sin fisuras aparentes, unas facciones humanas. Alison reconocía a aquel bombón moreno: era la representante latveria en el Festival.
- Pero si es Victoriosa -susurró Alison.
- Victoriosa es una Muertebot -susurró Brian, aturdido a la vez que empezando a entender que lo que sea que tramaba Victor von Muerte pasaba por ese detalle-. Tenemos que...
Entonces, la plataforma sobre la que estaba de pie la cantante latveria comenzó a alzarse hacia el techo, elevada por un pistón hidráulico.
- Salgo a escena. La victoria será nuestra.
Victoriosa pasó ante Brian y Alison sin verlos, se acercó al techo y, en el último momento se detuvo. Una escotilla se abrió automáticamente en las alturas, como una flor metálica, por la que se colaron la luz y los sonidos del Festival: la cantante de Sokovia terminaba su actuación, y unos instantes después el pistón siguió subiendo, llevando a Victoriosa hasta el escenario.
Brian y Alison salieron corriendo por el pasillo que habían llegado.
(CONTINUARÁ...)
"THE FEELING OF VICTORY" (Victorious, Eurovision Song Contest 2024)
All the courage and the dash
The heart of the lions we ride
The victory lap, we have won...
The victory lap, oh!
Take me back to all my younger years,
when we would never know victory
and that was real to me...
I know the feeling, the feeling of victory!
I fought so hard, for so long...
For you and I to share a peace of mind each day,
For your victory will always be my fall.
Be still, my heart, and pray
The lord our gods will choose as our king.
When he shall come again.
This victory swallowed me up
And the blood took my name.
I know the feeling, the feeling of victory!
I fought so hard, for so long...
For you and I to share a peace of mind each day,
For your victory will always be my fall.
For my sake and my pride, for my cause,
For my life and devotion.
For you and I to share a peace of mind each day
For your victory will always be my fall